viernes, 21 de octubre de 2011

Miedos

¡Hola!

Para entrar en el mundo de los adultos, enseñamos a nuestros niños a aparentar y fingir que no tienen miedo, que no se enfadan y que no están tristes pero estas emociones existen y con su represión les damos más poder.

Me parece que todos tenemos que aprender a sentir nuestros miedos sin huir para poder así hacernos responsables de lo que nos pasa aquí y ahora.  Cuando sentimos nuestros miedos y avanzamos a pesar de ellos, se convierten en oportunidades para demostrarnos a nosotros mismos que somos los dueños de nuestra vida y que podemos elegir en cada momento hacer algo diferente para conseguir cosas diferentes.

Cuando empiezo a dudar de mí misma me recuerdo que todo aquello que me da miedo es una oportunidad de crecimiento y que lo que yo quiero es crecer y ser un poco mejor cada día. Te dejo un vídeo motivador para que te animes a lo que sea que tú quieras:




Un abrazo,
Silvia

domingo, 16 de octubre de 2011

El agua

Cuando quiero relajarme casi siempre pienso en agua y uno de los recuerdos más agradables que conservo de mi infancia en Asturias es el ruído del río cuando todo estaba en silencio y me iba a dormir.

Desde que descubrí a Masaru Emoto y sus experimentos con el agua, gracias a una conferencia de Emilio Duró sobre el coeficiente de optimismo, me he hecho más consciente de la importancia que tienen nuestros pensamientos en la realidad que vivimos y en cómo nos sentimos. Si no has visto el documental  "¿Y tú qué sabes?" y te gusta plantearte preguntas para revisar tus creencias te lo recomiendo, yo no dejo de descubrir cosas interesantes cada vez que lo vuelvo a ver.

Te dejo un vídeo donde se resume el trabajo de Emoto y se plantea una pregunta interesante:





Un abrazo,
Silvia

jueves, 13 de octubre de 2011

No me falta nada

Hola,

Llevo una semanita bastante cansada y con la moral un poco baja, pensando más en lo que me falta que en lo que he avanzado y queriendo acelerar muchas cosas que no van al ritmo que deseo. Sé que la paciencia es una gran virtud que debo cultivar y en ello ando, intentando fluir...y disfrutar del camino.

Cuando estoy en plan quejoso se me olvida agradecer a la vida todas las cosas maravillosas que tengo y me viene muy bien ver vídeos como el que te dejo para volver a centrarme:



Gracias a personas como Tony, que nos sirven de ejemplo y modelo de superación.
Un abrazo,
Silvia

martes, 4 de octubre de 2011

Ítaca

A veces, se nos olvida disfrutar del camino porque nos obsesionamos con llegar a destino. Cuando tienes en mente un objetivo que te ilusiona recuerda centrarte en cada paso del proceso para aprender todo lo posible e intenta olvidarte del resultado final. Si das lo mejor de ti y no escatimas esfuerzos, la recompensa llegará. Estos últimos días, con el lío de la mudanza, lo había olvidado, pero alguien que me quiere bien me ha recomendado un poema precioso de Cavafis para recordarme el mensaje:




Espero que te guste, a mi la voz de Sean Connery me parece una pasada y me ha venido muy bien escucharla.
Besos,
Silvia